Un colega acá en el trabajo es un joven de unos 28 años, obeso, adicto a videojuegos y comics, lector exclusivamente de libros de fantasía, y que tiene dos características por las que lo evito: en cada almuerzo se toma una botella de Pepsi y después eructa estruendosamente, seguido de un casual “excuse me...”, como si hubiera sido un discreto estornudo. Y nadie se inmuta, por cierto, aspecto de la cultura local que me tiene intrigado.
El segundo repelente de este mi colega es que apesta: tiene ese hedor a cama, a sebo, a gordo desaseado tan pronunciado que yo, que tengo en el olfato lo que me falta en el oido, puedo decir en que lugares ha estado, por la peste que deja tras de sí...
Y hoy me contaba este personaje acerca de una tienda de comics que él visita con frecuencia, excepto viernes, que es el dia en que tradicionalmente realizan una competencia de fantasía, y los sábados, que es la competencia de juegos de estrategia. La razón de su ausencia es porque los muchachos que allí asisten apestan...
Pal carajo.
cómo deben estar los muchachos de esa tienda. Uno siempre siente que huele bien y es lindo. De hecho, yo tenía una amiga muy fea en la primaria que un día me dijo"¿viste que linda soy?". Y yo con mis 8 años, me quedé mirándola y pensando cómo era posible que se viera linda. Mejoró con el tiempo y la verdad es que es muy linda hoy en día. Capaz que al gordo le llegue el milagro.
ResponderEliminarpor cierto, el otro día me monté en la guagua, y tremenda peste. Y ya sabes, uno empieza a hacer memoria si se puso o no desodorante y a olerse debajo del brazo disimuladamente...Hasta que comienzo a prestarle atención a la conversación de los adolescentes de adelante, que decían a viva voz que no se habían puesto desodorante y que estaban pasaós, sin ningún pudor, como si ná.
ResponderEliminarEvolucionadas que vienen las nuevas generaciones
Hablando de Mundo Freak, yo yendo al trabajo los otros dias vi, por casualidad, al dueño de la tienda de Comics local abriendola..era el de los Simpsons!!! Pero de carne y hueso!!
ResponderEliminarEn Arizona vi un grupo, mas bien OLI, un grupo de esos muchachos separados del jabon. Nada, que no pude comer, asi de simple....
Y si te cuento la vecina, rubia gringa de revista, con sus dos hijitas rubias de ojos azules. Nos encontramos en pizzeria, compartimos mesa y la mayor de sus niñas decide que un moquito sabia mejor que la pizza, y a degustarlo ahi mismo, libre como el viento...y ella tan campante, muerta de risa. Mi mujer cuasi vomita.
Na, colores locales que estan cabrones..
No lo creo, pues me parece que el está contento consigo mismo.
ResponderEliminarEs un tipo sui generis. Tiene pasión por las cosas nórdicas (ay dió), medievales y germánicas, es fan de Halloween y de hecho su familia monta un timbiriche en la fecha en el cual, por módica suma, te puedes tomar fotos con tu cabeza en un degolladero mientras él, disfrazado de verdugo medieval, sostiene un hacha descomunal. Lo acompañan el padre disfrazado de Drácula y la madre y hermana disfrazadas de brujas.
El año pasado ganaron unos 40,000 dólares en una semana con la gracia, asi que gordo apestoso pero no bobo...
No tendrá familia cerca porque eso le pasa a mi hermano y como si le tengo que poner un pañuelito en la nariz con cloroformo pa que se desmaye y acto seguido meterle mano, jabón y cepillo ahí mismo...
ResponderEliminarLo del eructo, ya es más complicado.
jajajaajajaja. Son libres, chico, son libres.
ResponderEliminarOye Julio, esta gente son mas allá de medio cochinos, la verdad, esa cosa de eructar y tirarse peos, ¡hasta en los muñequitos y peliculas infantiles lo dan como una gracia!
ResponderEliminarMenos mal que la frase final que convirtió el asco en risa. Menos mal.
ResponderEliminarA mi eso de revisarme en medio de una multitud a ver si la que apesta soy yo no me pasa nunca. Desodorante y agua de toilette -L'Air Du Temps, Nina Riccii, desde hace trece años- hasta para dormir y ropa interior combinada. Si me muero en medio de la calle no seré yo la pobre difunta de la que se rían los estudiantes en la morgue.
cada vez que escucho esas historias, me pregunto por qué a mi no se me ocurren esas cosas. Hay quien con 5 hijos más se hace millonario, como los john y kate más 8
ResponderEliminarNi a mi, Charly, ni a mí...
ResponderEliminarG, este socio necesitaría, en lugar de Aire de los Tiempos, un muy buen tiempo al aire, a ver si se aliviana...
Por cierto, acaba de pasar el janitor por mi lado y está cantando bajito, jones...
Me gusta la idea de Ofelia, un palazo y escobillón con el gordo...
ResponderEliminarCreo que tendrás que cambiar de trabajo o repartir jabón por caridad...
ResponderEliminarAutocaridad quiero decir, ja ja
ResponderEliminarDebo mencionar un detalle más:
ResponderEliminarHe observado que mi obeso colega defeca varias veces al dia, como corresponde al dicho de asi come el mulo...
Varias veces me ha tocado entrar al baño y, o allí está, o acaba de irse. Por suerte para mi, y siguiendo la onda de la Guardarraya y en sintonía con la sugerencia de Ofelia, yo en las mañanas, después del baño de rigor, me rocío brevemente con Cool Water, de Davidoff, un toquecillo en el pecho.
Esta circunstancia me salva de la pestaza, pues meto la nariz en la abertura de la camisa o pulover de turno y así sobrevivo a ese ataque químico...
Tú sigue ahí y respira profundo. (Hmm, esa frase me tare asociaciones raras, mejor no profundizo...)
ResponderEliminarSi sigues en este proceso introspectivo vas a terminar clausurando el baño y metiendole jabon liquido al gordo en medio de la calle con el agua de los Bomberos..Piensa en el cheque del viernes y concentrate..
ResponderEliminarY digo yo, y si le pones al gordo una notita en el escritorio con la dirección de una de esas clínicas que ponen lavados perfumados a lo Florentino Ariza y Andrea Varón? A lo mejor te encuentras con un ser humano distinto la próxima vez que lo veas...
ResponderEliminarUds se imaginan la de capas que habría que quitarle al gordo? Rasparlo como a los esquimales...
ResponderEliminarEl cheque, el cheque!!!
ResponderEliminarOye, Guardarraya, que a uno también le ponían talquito de niña y su colonia de violetas...Pero lo cortés no quita lo valiente y cuando entro a un lugar apestoso, me reviso, porque me da pena pensar que a lo mejor soy yo; por si las moscas, vaya.
ResponderEliminarY Hv, usted sigue siendo mi héroe. Yo tuve uno por ahí que olía a eso mismo. Buen gusto que tiene usted para los perfumes.
Ojala que el gordo no lea tu blog
ResponderEliminarEl gordo no sabe español...
ResponderEliminarY Ud, mi amiga, y Ud...
por cierto, tengo una amiga que me contaba muy consternada que tuvo que compartir un café en un lugar público con una chica que se limpiaba las orejas y ponía los palitos sucios dentro del cenicero al centro como si nada mientras conversaba. Y era cubana, para que veas que en todas partes se cuecen habas
ResponderEliminarAy..qué asquerosito, por Dios...
ResponderEliminarYo me se pila de cuentos asquerosos...
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