“No se va a morir así
como así, ¿sabes?”, me dice, con sonrisa y ojos tristes, azules.
“¿Sí te dijo que
estuvo en Auschwitz? Tres años sobrevivió, allí, donde la
expectativa de vida eran, cuando mas, tres meses...” Y vuelve a
sonreir, con orgullo, un poco de brillo en los ojos esta vez.
“Ella tuvo una
buena vida, a pesar de todo. Mi madre, además, es la judía más dura que ha dado Polonia, nunca le sacó el cuerpo a las cosas difíciles. Y siempre ganó todas sus peleas. Pero, ¿sabes lo que más lamento? Que no sabe que está en su última pelea, no importa que la tenga perdida; le gustaría saber que la está peleando, eso que ni que... Dementia is a bitch”
PD: La señora falleció el pasado domingo 24. Hoy mi esposa me llamó, se encontró con la hija, que la saludó con un beso. "Se notaba que necesitaba un abrazo", me dijo mi esposa.
Que en paz descanse.
PD: La señora falleció el pasado domingo 24. Hoy mi esposa me llamó, se encontró con la hija, que la saludó con un beso. "Se notaba que necesitaba un abrazo", me dijo mi esposa.
Que en paz descanse.
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