Los puentes en la Autopista Habana-Pinar del Rio que no llevan a ninguna parte son parte de mi niñez. En cada uno de aquellos angustiosos viajes a visitar a la familia aquellas enigmáticas estructuras eran, junto a la Cordillera de los Organos que iba creciendo en el horizonte, mis referencias geográficas para saber que el viaje ya duraba menos.
Hoy Yoani Sánchez toca el tema de esos puentes abandonados. Y yo me acordé de aquel europeo que decía que en Cuba teníamos puentes de repuesto...
Este puente en particular no lo he visto nunca, Pinar del Rio me falta por visitar. Algún día.
ResponderEliminarDe hecho hay muchos, prácticamente uno en cada cruce.
ResponderEliminarPdR es precioso: Soroa, Viñales, el Valle de Luis Lazo, Guanacabibes... Hay que ir.