Hace algun tiempo vengo ojeando a los
muchachos que escriben en Havana Times, a Elaine Díaz
y a alguno que otro que, de alguna manera, parecen ser la nueva
izquierda cubana, que no por ser nueva es muy
diferente del dinosauriato pero bueno, de dos males, el menor.
Y dentro de ese
potaje me llama la atención el “movimiento” de blogueros, hasta encuentro acaban de tener, en la mejor tradición de organizar a los
vasallos en grupos controlados y yo controlo a todos los grupos,
diría el Dinosaurio, o sea, One ring to rule them all, vaya, que uno
llegaría a pensar que el Dinosaurio en sus tiempos leyó a Tolkien y
de ahí sacó sus ideas... si no fuera porque Hitler en su momento ya
las había puesto en práctica y con mucho éxito.
De tal manera ya se tenían a los pioneros, a las mujeres, a los vecinos, a los que cursan
grados medios, a los universitarios, a los jovenes comunistas, a los
adultos comunistas, a los campesinos, a los que trabajan en un mismo
lugar, en fin, a todos agrupaditos en organizaciones, y ahora parece es
el turno de los cuasi díscolos blogueros. ¿Tendremos pronto una
UBC, Unión de Blogueros de Cuba? No lo dudo ni por un instante.
Y es de risa ver
como algo que es inherentemente libre, es decir, Internet y la
interacción de las personas con la red, es inmediatamente tomado por
asalto por oficialistas y represores y se crean limitaciones,
regulaciones, declaraciones y mierda y media.
Hasta un lamentable
y ridículo Goebbels ha surgido como portavoz del Dinosaurio, una
entidad que se hace llamar Yohandri y que debe estar compuesta por un
grupo de obsoletos y mohosos ideólogos que escriben cosas como esta:
“...si ser
oficialista es defender la Revolución y el Socialismo -aunque
sepamos que hay que mejorar muchas cosas-, entonces, yo lo soy, y con
orgullo...”. Firma, Yohandri. Ya escribía yo hace unos días que
parece que uno de los problemas del Dinosauriato es la falta
de demagogos con demagogia fresca.
Yo siento que dentro
de ese grupo de blogueros insulares y/o oficialistas debe haber gente
con pensamiento realmente renovador, con un honesto deseo de cambio y
con tremendas ganas de decir y gritar. Pero entiendo también que
pocos están dispuestos a inmolarse.
Y todo ello me hace
sentir feliz como lombriz de estar sentado frente a mi computadora,
libre y liberado, y poder escribir, ver, mirar y disfrutar lo que
quiero y me gusta y no hay quién me lo coarte o impida.
Y feliz, además, de
no pertenecer a nadie, rediez, que rico.
Havanero, cada quien tiene una jaula personal ¿o no? Los discursos aquí o allá de acuerdo con la razón que se atribuye cada quien. Lo cierto es que allá la gente le da vueltas al parloteo, lo adornan o dirigen con sutilezas y giritos que parece que dicen pero no dicen nada. Tanto los que se dicen Voces o los que sugieren "Polémicas", cada quien en su comparsa personal sacando ventajas de su espacio virtual para propósitos que sólo ellos saben. Fingimiento, exageraciones, composición dramática, varias asignaturas que las carencias, supongo, les ha obligado a aprobar. Acá al menos yo, choco con otras rejas, en México hay que publicar con cuidado, decir poco de uno y estar atento a la respiración en el hombro.
ResponderEliminarSi, yo creo que cada castillo tiene sus fantasmas, pero lo de allá, oye, los de allá se las traen...
ResponderEliminar"Y todo ello me hace sentir feliz como lombriz de estar sentado frente a mi computadora, libre y liberado, y poder escribir, ver, mirar y disfrutar lo que quiero y me gusta y no hay quién me lo coarte o impida."
ResponderEliminarNico, ese párrafo te quedó cuqui! ;))
Oye Mireya, que aunque no suene bonito, tan sólo por eso valdría la pena emigrar...
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