He estado viendo la serie Games of
Thrones en HBO por pura curiosidad, pues leí
los libros y al menos los tres primeros son piezas formidables de la
literatura fantástica. Y por lo que he visto
hasta ahora hay actuaciones extraordinarias en algunos personajes, la
ambientación no deja nada que desear y algunas escenas están muy
bien logradas. Pero la historia se queda corta, cortísima, ante la
riqueza descriptiva y narrativa de los libros.
A pesar de eso la
serie televisiva goza, al parecer, de mucha popularidad y leí que le
acaban de aprobar la tercera temporada y con un 15% de aumento en el
presupuesto. Decía que los tres primeros libros son excelentes, pero
el cuarto es casi un bodrio y el quinto está pasable;
paradojicamente, quizás la TV los haga mejores, si llega la serie
logra llegar a esas alturas.
Pero, a pesar de las
decepciones, ya yo soy fan de la saga y estoy esperando con ansiedad
el sexto libro. Mi única preocupación al respecto es que el autor,
George. R. R. Martin, es un hombre bien entrado en años y se toma su
tiempo con cada libro (para los tres primeros, 10 años) y si se
muere, ¿quién termina la historia?
En fin, que la
maravilla del “El Señor de los Anillos”, tanto la de los libros
como la de las películas, es difícil que se dé dos veces...
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