Sin pretender aguarle festejos a nadie,
que Raúl Castro se muera no es importante, lo cual ha quedado
demostrado con la muerte de su hermano en jefe.
El término “república bananera”,
que en algo que hoy leí así denominaba el autor a Cuba, no es
correcto. En todo caso sería República Boniatera, siempre que se
cumplieran los planes de la cosecha en Ciego de Avila o lugares
parecidos, claro.
Vista la experiencia, secuela
implacable de la realidad, el marxismo, como objeto de estudio,
filosofía o divertimento académico, es una suerte de ejercicio
forense. Particularmente de ese cadaver que es su ingrediente
histórico, por no mencionar al aborto que se llamó comunismo
científico.
Vamos, nadie sabe qué vendrá en las
próximas décadas en términos de sistemas socioeconómicos, pero
esperar que regrese algo marxista es como aspirar a que resurjan los
Neandertales.
El arroz Arborio es una maravilla
culinaria: se le puede adicionar seis veces su volumen en líquido, y
el grano aun mantiene su integridad; una taza de arroz alimenta a
cuatro personas de buen comer. Comprobado. Si aquel llega a
enterarse...
Trump ha perdido su atractivo principal
como animador de las noticias matutinas. Encima de inepto, aburrido.
Le comentaba a mi familia que los
checos son grandes aficionados a la música clásica. Que el Festival
Primavera de Praga inicia todos los años en al aniversario de la
muerte -ojo, no del nacimiento, muy a tono con la melancolía
eslava- de Bedřich Smetana, y su sinfonía “Mi Patria”. O quizás
el festival no celebra el nacimiento porque Smetana nació en Marzo,
cuando aun hay mucho frío, pero se murió en Mayo, en plena
primavera. Los checos también son gente muy práctica, me consta.
Que los checos, les decía además, acuden a los conciertos con la
misma pasión que los cubanos escuchan regetón.
El otro día vi una foto donde una
lesbiana, mostrando su lengua entre los dedos índice y del medio de
su mano, hacía referencia, se sabe, a un cunnilingus, probablemente
recién realizado, mientras su pareja miraba a la cámara con
expresión somnolienta, post-orgasmo quizás.
Si yo publico una foto mía y de mi
esposa en el postcoito, gesto más, gesto menos, creo que sería
divorcio instantáneo, por falta de clase. Vamos, que esto del alarde
de la condición sexual no está llevando a nada razonable, mucho
menos elegante. Prueba de ello es que los hombres hablantines
adolecen de todo lo que presumen.
Ayer compré un salchichón italiano
-puse la foto por acá- que parece necesita de cocción intensa pues
está hecho con los más humildes trozos de la anatomía porcina.
Debe estar muy sabroso, pienso, pues se sabe que la carne sin grasa
ni mácula es mujer que está buena pero no sexy.
El calor es tóxico para la
civilización. El que no lo crea, que observe los mapas.
Y feliz resto de la semana tengan
vuestras mercedes.
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